Euskal Artzainak Ameriketan es una asociación constituida en 2011 con domicilio en Navarra. El objetivo principal de la misma es la difusión del modo de vida, las condiciones de trabajo de los conocidos en EEUU como “pastores vascos”. Es decir, dar a conocer cómo ha vivido, trabajado, de qué manera han vuelto… los que se quedaron en EEUU cual ha sido su desarrollo personal y profesional.

Para ello, la asociación ha realizado una serie de paneles fotográficos donde se pretende mostrar su modo de vida, siendo ésta una parte muy importante de nuestra historia.

El mayor flujo migratorio se produjo en la década de los 50-60 del siglo XX. Se puede decir que prácticamente en cada casa del Pirineo, Baztan-Malerreka-Bidasoa, Basaburua, Ultzama, Iparralde etc… había alguien que emigró.

La mayoría de ellos emigraron a la zona Oeste del país.

La mayoría de ellos emigraron a la zona Oeste del país

En esta época los pastores iban en avión y llegaban vinculados a un contrato de trabajo donde se establecía el periodo que debían permanecer en el país. Estos contratos usualmente tenían una duración de unos tres años y medio prorrogables 6 meses más. Para la prórroga del mismo, los pastores debían retornar a su casa y posteriormente volver a EEUU.

El periodo de trabajo de dividía en 2 partes fundamentalmente:

• En la época invernal se cuidaba el rebaño en los pastos de alfalfa.
• En la primavera el cuidado se realizaba en las lomas (montes bajos) y en el desierto.
• En el periodo estival de los valles y el desierto subían a la montaña, que solía ser una “trashumancia” de unos 30-40 días y los rebaños que se quedaban en los valles, se pastaban en las rastrojeras. Esto ha ocurrido en California, Nevada, y Arizona, siendo la parición en otoño-invierno. En el caso de Utah, Idaho, Wyoming donde la parición es en primavera, solían estar más en la montaña y por ello el trabajo era más duro.
• El cambio de paisaje se puede apreciar en las fotos; la sequedad de las lomas y el verde de lospastos. Debido a esto pasaban muchísimas temporadas en completa soledad, sin ver a nadie, con la única compañía de su perro y su caballo.

Debido a esta pequeña trashumancia y dependiendo de las zonas los pastores solían vivir y dormir en diferentes tipos de techos: paqueburro, carromato o directamente en la fresada al raso.

Además, para transportar sus pertenencias utilizaban burros o caballos. Otro animal que siempre los acompañaba era el perro, de gran ayuda en su trabajo.

Las obligaciones de los pastores, además del cuidado de las ovejas, consistían en castrar corderos, ayudar en el parto, cargar los camiones, esquilar… Había un gran sentido de hermandad; por ello, se ayudaban en la vida cotidiana mutuamente. Los pastores que llevaban muchos años podían ascender a “camperos”, eran los encargados de llevar la comida y otros servicios necesarios a sus compañeros con el fin de que desarrollaran sus actividades lo más normalmente posible

Cuando estas personas quedaban libres (una vez finalizado el contrato) pasaban a desempeñar labores en lecherías, jardineros, minas, construcción…

Muchos de estos jóvenes volvieron, otros se quedaron a vivir en EEUU y se establecieron allí formando sus familias, algunos de ellos crearon empresas relacionadas en su mayoría con el sector primario (agrícola-ganadero) y que sirvió para emplear a gente de aquí, etc… pero todo el mundo recuerda esa época en que tuvieron que emigrar para poder ayudar en casa o simplemente tener un trabajo mejor.

Jóvenes que tuvieron el coraje de lanzarse a una aventura en un país desconocido, en un trabajo duro, con un idioma que no entendían; eso sí con mucha ilusión y esperanza. A todos ellos GRACIAS por contribuir a nuestra historia y por enseñarnos tantas cosas.

Esta exposición va dedicada a todos ellos: a los que fueron y volvieron, a los que se quedaron, a los que están y a los que se han ido.